Ayer fue un paraíso y hoy tengo frío
12:48
Las groseras muecas de la vida: un hombre se ahoga en el mar y ahí ocurre la muerte de su esposa
Las caricias marchitas hoy anidan en un rostro sin piel, que mira atónito. Da lástima el recuerdo al amar días frente a la mar ardían frente llena de planes yo reventaba en calor el color de sonrisa suficiente es la sombra de la muerte
Engañadas sonrisas en labios de muchachos. Conyugal risa muerta del matrimonio que odia. La vida es una pausa.
Cuerpos: Los gordos monumentos. Mirada que nace del vacío
Miente si es necesario y dale, a cada día de los relojes, a cada minuto de las pieles, laxas luces que oculten las miradas podridas
Quisiera gritar como un loco: reír, herir, ir al río y flotar, ver las altas acelgas azules, morir sin voces alrededor. Simple como mi vida sin vidas; pasto, un sol, un monte eso basta
Pero lee las líneas prohibidas. Escucha los sonidos vedados, extrapola mis ideas y ahórcate con los adjetivos:
Pero lee las líneas prohibidas. Escucha los sonidos vedados, extrapola mis ideas y ahórcate con los adjetivos:
intacto
dolido
cóncava
navegante
ahórcame y muramos todos, pero vivamos un momentito:
pausa
pausa
aún pausa
stop
Bebamos de este tiempo otrora
sicalíptico, los ayeres dulces de la memoria
Pozo de los deseos: deseo
ver el mar y soñar, sólo soñar, bañar mis sueños con sal, ceñir tus señales con la lengua húmeda de todas las realidades
Ayer fue un paraíso y hoy tengo frío
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