Ese único calor que conoces
17:41
De
lunes a sábado prepararás comida para extraños que ya no te son
ajenos. Tus manos curtidas han envejecido al amparo del fuego de la
estufa, del calor de las ollas, el único que conoces. Miles de
cebollas y tomates han pasado debajo de tu cuchillo. Cientos de
pollos han sido aderezados y cocidos, en medio de un vapor constante.
De lunes a sábado servirás platillos insípidos para paladares
anestesiados y, al final, por las tardes, mientras laves el piso de
la fonda, ignorarás que también lavas de tu vida cualquier
resquicio de ambición
0 comentarios