Soy de los suyos

18:26



Mis vecinos pálidos, ojerosos, me traen el dulce olor de la peste. Exangüe rostro solvente del mundo y mi excreción mezclada con el día. Busco la peste igual como ella a mí. No hay alternativa mórbida vida
La mecánica de los manicomios, gasolineras incendiadas y un buen saludo ante el amanecer. Eyección dolorosa reiterada, maldita verdad, ámpula perenne de un viaje largo sin Ítaca. Ellos, como yo, empezamos a morir
Y en un día soleado las cenizas de nuestros huesos subirán, fantasmas grises, ensartadas de luz. Manto blanco que caes como fuente, cascada la muerte inunda las vidas
Nuestras blancas cenizas subirán y vecinos nuestros y yo holgaremos, desde la claridad de una mañana de verano. La sombra de nuestro humo no refresca
Vecinos queridos: amadme pues soy de los suyos

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